y tiene fuertes vinculaciones con los clubes de bikers en Estados Unidos, aunque su desarrollo tiene particularidades propias. El primer club de motociclistas en Tijuana fue Ángeles del Camino fundado en 1959, los miembros de su club alegan no sólo haber sido el primero en Tijuana sino en toda la República Mexicana. Una de las particularidades de la reunión en torno a los motos de este club es que comenzó siendo el escuadrón acrobático de la policía de La Mesa y posteriormente decidieron conformarse como club social de motociclistas. Al año de haberse conformado se deshizo, y unos años más tarde se conforma el club de motociclistas Sólo Ángeles cuyo presidente fundador, Manuel ‘Meño’ Burgóin, había estado en las filas de los Hells Angels. Las explicaciones que han dado en torno al nombre provienen de querer tomar distancia de ambos clubes. Se dice que como ya habían existido los Ángeles del Camino, decidieron simplemente ser Sólo Ángeles, también se comenta que quieren hacer notar que no forman parte de los Ángeles del Infierno (Hells Angeles). Este última idea se recoge mucho tiempo después en un libro de entrevistas a diversos perfiles de tijuanenses y en entrevista a un miembro del club se dice que “Lejos de ser ‘Ángeles del infierno’ ellos son ‘Sólo Ángeles’” (Silva, 2003:164). Lo que sí puede decirse de Sólo Ángeles es que es el club más antiguo que aún sigue funcionando en Tijuana y es el que cuenta con más elementos en toda la ciudad, más de 200. Este club, más que iniciar con el objetivo de ser una asociación reglamentada con actividades de ayuda mutua con labores benéficas a la comunidad, surgió de la convivencia entre amigos y el gusto por las motos. Con el paso del tiempo, fueron adquiriendo forma de club al verse en la necesidad de formalizar sus prácticas y al tener integrantes que habían formado parte en clubes norteamericanos o en instituciones policíacas. Los sesenta y setenta fue un periodo de altibajos para el club Sólo Ángeles, pues en esos años se formó el club con aproximadamente unos 12 integrantes, pero también decayó porque muchos de sus miembros migraron para Estados Unidos e incluso murió el ‘Meño’ Burgóin, quedándose a la cabeza del movimiento un miembro que será legendario para el club, Manuel Salcido, el ‘Suzuki’. A mediados de los setenta un grupo de amigos liderados por el ‘Suzuki’ se juntaban en Playas de Tijuana, con un especial gusto por las motos. Los viejos socios del club comentan que comenzaron incluso a capitalizar la imagen del biker, ya que su aspecto les ayudaba para tener acceso a clubes nocturnos y poder hacer contacto con las muchachas quienes siempre les pedían un ‘raite’ en la moto. Fue para estas fechas que estos compañeros, algunos de los cuales habían sido Ángeles del Camino, decidieron formalizar su convivencia e institucionalizar el club como lo hacían los bikers del otro lado de la frontera. Tener motocicleta y ganarte la admiración y el respeto para portar los importantísimos colores (parches del club en el chaleco), signo de identificación, serían los requisitos para ser un Sólo Ángel. Para la década de los ochentas comenzaron a sesionar con una mesa directiva y una estructura militarizada al estilo de los clubes norteamericanos. En esas mismas fechas comenzaron a hacer eventos benéficos para la comunidad tijuanense tratando de redimir la opinión negativa del biker. El Toy Run, evento organizado por el club en donde entregan juguetes a niños necesitados, está consolidado y reconocido ya por buena parte de la población tijuanense. De manera que, al revés que los Dukes, la idea de ser un club de servicio se integró tiempo después de fundado el club, la primera intención fue reunirse en torno a las máquinas motoras. En la década de los noventa el club llegó a tener hasta cincuenta miembros, pero no es hasta el 2000 que tiene un boom de socios, y según sus registros, el número llegó a ciento setenta. La explicación que ofrecen los miembros del club de este crecimiento gira en torno a la situación restrictiva y vigilante que se suscitó en Estados Unidos después de la caída de las torres gemelas en el 2001, en donde tijuanenses residentes en San Diego decidieron integrarse al club en Tijuana. Tuvieron entonces que hacer más restrictivos los requisitos para entrar ya que querían seguir teniendo control de la situación y querían continuar con la idea de ser, antes que nada, un grupo de amigos. 22 La historia del club Sólo Ángeles en su mayor parte la reconstruyo a partir de entrevistas con miembros del club, sobre todo con los miembros más antiguos, así como de algunas conversaciones informales que quedaron registradas en mis notas de campo. De igual manera, retomo algunas líneas argumentativas de unos videos documentales que se han hecho sobre el club, uno producido por Bulbo y uno producido por NQV producciones que se realizó en 2010 a la muerte del Suzuki, presidente del club por más de 30 años.